Integración social para la población migrada
El Proyecto de integración social que acompaña a personas migrantes, inspirado en los pilares que promulga el Papa Francisco de acoger, proteger, promover e integrar, refleja una visión holística y humanitaria que busca garantizar el bienestar y la dignidad de las personas migrantes. Según el Santo Padre, estos pilares son fundamentales para construir sociedades más justas, inclusivas y solidarias.
El Proyecto de integración social de las personas migrantes, inspirado en los pilares de acoger, proteger, promover e integrar, refleja una visión holística y humanitaria que busca garantizar el bienestar y la dignidad de las personas migrantes. Según las palabras del Papa Francisco, estos pilares son fundamentales para construir sociedades más justas, inclusivas y solidarias. En Cáritas Diocesana de Almería, dentro de dicho Proyecto, nos centramos en acompañar a los participantes trabajando desde estos cuatro verbos. Perseguimos que, a través de una entrañable acogida, podamos proteger a nuestros participantes y ayudarles a integrarse en nuestra sociedad, promoviendo una formación completa para lanzarlos al mundo laboral y puedan conseguir un trabajo digno con el que ellos comiencen una nueva vida de esperanza e ilusión.
Nos dice el Papa Francisco, “ACOGER significa, ante todo, ampliar las posibilidades para que los emigrantes y refugiados puedan entrar de modo seguro”.
Este principio se centra en la importancia de recibir a las personas migrantes con calidez y respeto, reconociendo su humanidad y las razones que los llevaron a abandonar sus hogares. La acogida implica no solo dar la bienvenida, sino también ofrecer un entorno seguro donde estas personas puedan sentirse valorados y respetados. De ahí que en nuestras Cáritas Parroquiales, los voluntarios realizan la acogida en un ambiente cálido y solidario donde se les brinda apoyo y asistencia, tanto emocional como material. Esta forma de encuentro no solo beneficia a los participantes, sino que también enriquece la labor de las Cáritas Parroquiales, fortaleciendo la comunidad y promoviendo la solidaridad.
“PROTEGER se conjuga en toda una serie de acciones en defensa de los derechos y de la dignidad de los emigrantes y refugiados, independientemente de su estatus migratorio”, según palabras de Francisco.
La protección de los derechos de las personas migrantes es esencial para asegurar su seguridad y bienestar. Esto incluye la defensa de sus derechos humanos y la implementación de políticas que prevengan la explotación, la discriminación y la violencia. La protección se extiende también a la salud, la educación y el acceso a servicios básicos.
Desde nuestro Proyecto de integración social ofrecemos ayuda y protección tanto a través de las Cáritas Parroquiales como proporcionándoles asesoramiento, orientación e información sobre servicios legales gratuitos. Se imparten charlas y sesiones informativas sobre derechos legales en áreas como vivienda, protección contra violencia, regularización de documentación, cuentas bancarias, etc. Al combinar el apoyo comunitario de Cáritas Parroquiales con el asesoramiento jurídico adecuado, se les ofrece una protección integral que no solo atienda las necesidades inmediatas, sino que también empodera a los participantes en su vida cotidiana.
Nos dice el Santo Padre, “PROMOVER quiere decir esencialmente trabajar con el fin de que a todos los emigrantes y refugiados, así como a las comunidades que los acogen, se les dé la posibilidad de realizarse como personas en todas las dimensiones que componen la humanidad querida por el Creador”.
Promover implica dar a las personas migrantes las herramientas y oportunidades necesarias para desarrollarse y participar plenamente en la sociedad. Esto incluye el acceso a la educación, el empleo y el reconocimiento de sus competencias y habilidades. Fomentar la participación activa de estas personas en la vida comunitaria es clave para su empoderamiento.
Por eso, en nuestro proyecto promovemos la formación de los participantes en clases de español, talleres y cursos de formación específica donde puedan desarrollar habilidades y destrezas para que puedan conseguir un puesto de trabajo digno. Se les proporciona orientación y asesoramiento sobre cómo buscar empleo, creando su propio curriculum. Se establecen mecanismos de evaluación al finalizar cada curso o taller para recoger opiniones y mejorar los programas. Se mantiene contacto con los participantes para conocer su progreso laboral y poder ofrecerles soporte adicional si fuera necesario. Se comparten historias de participantes que han conseguido empleo gracias a la formación recibida, lo que ayuda a motivar a otros a unirse.
Al implementar estas acciones, no solo se ayuda a los participantes a mejorar sus habilidades lingüísticas y técnicas, sino que también contribuimos a su integración en el mercado laboral, proporcionando herramientas que les permiten acceder a un trabajo digno y satisfactorio.
“INTEGRAR en el plano de las oportunidades de enriquecimiento intercultural generadas por la presencia de los emigrantes y refugiados. La integración no es una “asimilación que induce a suprimir o a olvidar la propia identidad cultural”. El contacto con el otro lleva a descubrir su “secreto” a abrirse a él para aceptar sus aspectos válidos y contribuir así a un conocimiento mayor de cada uno”, señala Francisco.
La integración de los participantes en la sociedad es un proceso dinámico que involucra la colaboración activa entre voluntarios y los mismos participantes, la sensibilización de la comunidad y la importancia de compartir experiencias. A través de estas acciones, se puede crear un entorno más inclusivo donde todos se sientan valorados y apoyados.
Desde nuestro Proyecto promovemos el intercambio cultural y la convivencia entre voluntarios y participantes a través de actividades y clausuras de los curso y talleres, donde, a la vez, se lleva a cabo sensibilización con la población local, mostrándoles el trabajo de las Cáritas Parroquiales en cada zona de la provincia de Almería y facilitándoles a los participantes la oportunidad de acceder al a un puesto de trabajo dándoles a conocer a personas relacionadas con el mundo laboral.
Por otro lado, se realiza una campaña de sensibilización por los Centros educativos de Almería capital y provincia donde se llevan a cabo diferentes actividades con los chicos y chicas para que empaticen con las personas migrantes y se acerquen a la realidad que les rodea.
Decidimos centrarnos en el enfoque del Papa Francisco sobre estos cuatro pilares, porque con nuestro Proyecto de integración social queremos ayudar a transformar la experiencia migratoria en una oportunidad para el enriquecimiento social y cultural de toda la comunidad. Con esto, sabemos que no solo se beneficia a las personas migrantes, sino también a la población local, y así podemos fomentar una sociedad más inclusiva y diversa.